ICuidan de sus hijos, limpian sus cocinas y tienden su ropa lavada pero, a menudo, resultan como invisibles. Muchos de los trabajadores domésticos migrantes del mundo no son protegidos por la ley y sus derechos son pisoteados. A menudo se trata mujeres que trabajan muchas horas, por un salario escaso. Disfrutan de poca seguridad económica y no tienen protección contra los maltratamientos.
Caritas exhorta a la comunidad internacional para que proteja a los trabajadores domésticos inmigrantes. Necesitan el respeto de los empleadores, libertad para cambiar de empleo y el reconocimiento jurídico de su trabajo. Merecen los mismos derechos que disfrutan sus empleadores y otros trabajadores. “Bajo el mismo techo, bajo la misma ley”.
Lea más sobre la labor de Caritas en favor de los trabajadores domésticos migrantes:
Comunicados de Prensa:
- Defender los derechos de los trabajadores domésticos inmigrantes
- Día Internacional de la Mujer: Hay que proteger a las inmigrantes en el servicio doméstico
- Proteger a los trabajadores domesticos contra la explotación
- Necesarios y explotados – El sufrimiento invisible de las/os empleadas/os de hogar inmigrantes
Oración: La mujer que está a tu lado
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- Global forum on migration and development
- A better life – but what cost?
- The strange case of immigrant carers and the elderly in Italy
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