“Esta guerra supone, en primer lugar, un enorme sufrimiento. Lo que vemos es una catástrofe humanitaria. Caritas Ucrania y Caritas-Spes están con la gente que sufre”, afirmó Monseñor Michael Landau, presidente de Caritas Europa, durante una conferencia de prensa en línea celebrada por Caritas Internationalis, el pasado 1 de marzo. La confederación Caritas exhorta a los gobiernos, a las ONG y a todas las personas a trabajar juntos para facilitar corredores humanitarios eficaces, con el fin de proporcionar atención, esperanza y ayuda vital a la sufrida población de Ucrania.
El secretario general de Caritas Internationalis, Aloysius John, durante la misma conferencia de prensa en línea señaló: “Caritas Internationalis reitera que la ayuda vital para la gente no puede llegar sin un corredor humanitario protegido y seguridad para las personas que están camino del exilio” e hizo un llamamiento a la solidaridad y la compasión, para ayudar a todos los afectados por el subsiguiente conflicto en la Europa del Este.
Tras el anuncio del papa Francisco de una jornada de oración y ayuno por Ucrania el 2 de marzo, Miércoles de Ceniza, Aloysius John indicó que “Caritas Internationalis se une al Santo Padre en su oración por la paz en Ucrania y el fin de la violencia e insistimos en abogar por una resolución pacífica e inmediata del conflicto”.
Según fuentes del ACNUR, más de 600.000 personas han huido de Ucrania una semana después del estallido de la guerra entre Rusia y el país del este de Europa, el 24 de febrero, con varios miles de hombres, mujeres, niños y ancianos que están en tránsito. Posteriormente, se está produciendo una crisis humanitaria y de refugiados en países vecinos como Bulgaria, Hungría, Moldavia, Polonia y Rumanía. Sin embargo, a pesar de la situación altamente volátil y peligrosa, el personal y los voluntarios de Caritas de toda la Europa del Este se han apresurado a prestar asistencia vital y atención a las personas que sufren, en sus comunidades locales.
Hasta la fecha, Caritas-SPES ha prestado ayuda a 2.000 desplazados internos, en su mayoría mujeres y niños, con alimentos, medicinas y alojamiento temporal. Están ofreciendo refugio a más de 2.500 madres con hijos y proporcionando alimentos a unos 1.000 refugiados cada día, a lo largo de la frontera del país. “Por favor, salven a nuestra gente. Sé que todo irá bien, pero pienso en cuántos de ellos no podrán volver al país. Sí, porque también es muy difícil estar fuera y pensar en Ucrania y en la familia que se queda aquí”, afirma el P. Vyacheslav Grynevych, director ejecutivo de Caritas-Spes Ucrania.
Tetiana Stawnychy, presidenta de Caritas Ucrania, indicó que el personal y los voluntarios de Caritas han ayudado activamente a proporcionar alimentos, ropa y apoyo psicosocial. “Sí, esto es un gran trauma para toda la población… Veo a muchos padres que se esfuerzan con dificultades por guiar a sus hijos, corriendo de un lado a otro, de arriba abajo y luego, al sótano, cada vez que suenan las sirenas de los ataques aéreos”, dijo. Además, declaró la necesidad de más suministros médicos y de mejores soluciones de adquisición para suministrar artículos de primera necesidad, como mantas y colchones a los desplazados más vulnerables y a los que están en tránsito por las fronteras del país.
Con el apoyo y la solidaridad de la confederación Caritas, Caritas Ucrania (UA) y Caritas-SPES han podido proporcionar ayuda humanitaria esencial para el pueblo ucraniano y se están preparando, con el apoyo de Catholic Relief Services, para poner en marcha una llamada de emergencia para llegar a las víctimas de esta guerra.
“Europa y el mundo no debe olvidar al sufrido pueblo de Ucrania. Nos necesitan y nos necesitan ahora… cada euro cuenta y puede salvar vidas. Así que, por favor, hagan lo que puedan para apoyar el trabajo allí y en los países vecinos”, dijo Monseñor Michael Landau, presidente de Caritas Europa.
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