Leaving a Legacy & Tribute Gifts

For many donors a legacy, or planned gift, is the largest gift that they will ever make

A tan solo 50 km de la capital guatemalteca, el Volcán de Fuego hizo erupción el pasado domingo a las 3:00 p.m. hora local; las columnas de fuego alcanzaron los 10.000 metros por encima del nivel del mar. Ríos de lava, gas caliente y materia volcánica destruyeron casas y cultivos, provocando muertes y grandes cantidades de heridos. Más de 10.000 personas han sido evacuadas y 1,7 millones han sido afectadas.

El gobierno ha declarado un Estado de Calamidad en Chimaltenango, Escuintla y Sacatepéquez en las regiones central y meridional de Guatemala a fin de «mitigar, restablecer la infraestructura, los servicios básicos y evitar mayores consecuencias».

Los densamente poblados pueblos Los Lotes y El Rodeo han sido los más afectados por la erupción volcánica, dice la Diócesis de Escuintla. Estos son pueblos de agricultores y pequeños terratenientes. Todos han sido afectados, pero la densidad demográfica ha exacerbado la gravedad de la catástrofe, dejando a muchas personas aisladas, sin poder recibir apoyo y sin medios de sustento.

Epicentro de los operativos guatemaltecos de ayuda de emergencia en Escuintla, tras la erupción del Volcán de Fuego el domingo 3 de junio.

La Iglesia ha abierto albergues y un centro de acopio para recibir artículos esenciales de emergencia como medicinas, ropa y víveres para las familias afectadas. El equipo de Caritas Guatemala está trabajando en los albergues para ayudar a los damnificados.

Evolución de la tragedia

En uno de los albergues en Escuintla se encuentra Julia Gonzáles, 62, que vivía con su familia en la comunidad «La Reina» en El Rodeo, Escuintla, una de las comunidades más afectadas.

«Estábamos acostumbrados a escuchar pequeñas explosiones bajo tierra y a veces el cielo se nublaba, así que pensamos que era normal porque vivíamos cerca del volcán; pero esta vez fue muy diferente, en cuestión de segundos el cielo se oscureció por completo, vimos caer la ceniza y, por el ruido tan fuerte, sabíamos que algo muy malo estaba pasando», dijo.

La nieta de Julia, Ángela, es consolada por su tía. Ángela perdió a sus padres y a una hermana en la erupción.

Ese domingo, la hija de Julia, María Cristina, había salido con su esposo y su hija pequeña a vender piñas. Había dejado a sus otras tres hijas con Julia.  Cuando apareció la nube de humo, Julia les pidió a sus hijos que fueran a buscar a María.  Subieron corriendo a la montaña en busca de su hermana, pero después de unos minutos volvieron diciendo que un río de lava, rocas y ceniza se deslizaba hacia la casa.

«Mi hija, mi yerno y mi nietecita murieron en ese río de lava, mis nietas perdieron a ambos padres», dijo Julia.

Dese el domingo, nubes de ceniza cubren el cielo a 20 km del cráter del volcán y se espera que se extiendan con el viento. El 5 de junio, el volcán volvió a hacer erupción con explosiones de moderadas a severas lanzando ceniza a 5.000 m en dirección este y noreste. Por la noche, nuevas corrientes de lava se deslizaron en dirección del barranco de Las Lajas.

El volcán podría seguir haciendo erupción por lo que se le ha pedido a la gente que se mantenga alejada de las proximidades.

Más de 2.500 personas se encuentran en albergues temporales. Se han instalado doce albergues en Escuintla y uno en Sacatepéquez.  La Diócesis de Caritas de Zacapa también ha abierto albergues en tres iglesias y está recolectando víveres y artículos básicos, además de recibir donaciones.

La respuesta de Caritas

El Equipo de Caritas Guatemala está trabajando en los albergues de las diócesis para evaluar la situación y prestar la atención necesaria a las personas que se encuentran en los mismos. La Oficina Nacional de Caritas Guatemala ha abierto un centro de acopio y se han abierto cuentas para aceptar donativos nacionales e internacionales.

Escenas de albergues en Escuintla Guatemala. La Iglesia ha abierto albergues y un centro de acopio para recibir artículos esenciales de emergencia como medicinas, ropa y víveres para las familias afectadas.

Monseñor Ángel Antonio Recinos Lemus, obispo presidente de Caritas Guatemala está solicitando la cooperación de la Confederación Caritas para atender a estas familias afligidas y brindarles apoyo psicosocial, ayudarles a recuperar sus medios de sustento, ayudar a la construcción de viviendas dignas y satisfacer otras necesidades básicas. Asimismo, aplaudió la impresionante solidaridad demostrada por el pueblo, las instituciones, iglesias y académicos que han ofrecido sus servicios como voluntarios, algunos de los cuales han dado sus vidas para salvar a otros.

En un mensaje, el Papa Francisco reivindicó su cercanía con los heridos y con aquellos que están «trabajando sin descanso para ayudar a las víctimas», al mismo tiempo que le pide al Señor que «les de todos los dones de solidaridad, serenidad espiritual y esperanza cristiana». La Confederación Caritas se solidariza con Caritas Guatemala y con el pueblo guatemalteco para una pronta recuperación. #TODOSSOMOSGUATE

Foto de Iván Palma/CRS