Muchos migrantes del Norte de África atraviesan a Italia que, por su parte, está haciendo un trabajo excelente haciendo frente a la llegada de numerosos grupos de inmigrantes. Sin embargo, en Europa sigue habiendo países muy egoístas.
Líbano acoge a un millón de refugiados sirios, más que cualquier otra nación. Y Bekaa es el hogar de cuatrocientos mil de ellos, más de los que hay en cualquier otro lugar del país.
La ley en Siria establece la edad mínima para casarse a los 17 años para los chicos y a los 16 para las chicas. Sin embargo, a los líderes religiosos les está permitido aprobar matrimonios informales a la edad de 13 años para ellas y de 16 años para ellos.
Los sirios siguen huyendo de la guerra que hay en su país, cruzando la frontera a Líbano y a otros países vecinos. Aunque sea para enfrentarse a una vida de incertidumbre como refugiados; dicen que no tienen elección porque tienen que salvar a sus hijos.
Caritas Irak está distribuyendo ayuda alimentaria, ropa de cama y kits de higiene a unas 2000 familias iraquíes que escaparon de sus casas tras las violencias registradas en el norte del país.
Más de un millón de refugiados sirios vive en Líbano. Les preguntamos a ellos y al equipo de Caritas de allí por un deseo para el Día Mundial de los Refugiados, el 20 de junio.
Exigimos que cesen los combates y que se leponga alto al comercio de armas que alimenta la guerra en Siria. ¡Ayudemos a Siria a retomar el camino de la reconciliación y la paz mediante una decisión a nivel internacional!
En el Día Mundial de los Refugiados, Caritas exhorta a las naciones del mundo a que les den a los refugiados sirios un visado humanitario de entrada para ayudar a garantizar su seguridad y bienestar al huir de la guerra en su país.
Para frenar la propagación de la enfermedad, Catholic Relief Services ha empezado a construir letrinas en el recientemente construido campamento de Kambioos.
“...Pienso también en la obra de caridad llevada a cabo por instituciones de la Iglesia como Cáritas Jordania y otras que, asistiendo a los necesitados sin realizar distinciones de credo religioso, identidad étnica o ideológica, manifiestan el esplendor del rostro caritativo de Jesús misericordioso”.