Caritas Internationalis está solicitando asistencia urgente para ayudar a millones de personas afectadas por el empeoramiento de una crisis humanitaria en la región africana del Sahel. Casi 6 millones de personas en Burkina Faso, Chad, Mali, Mauritania, Níger y Senegal están luchando para cubrir sus necesidades alimentarias diarias. La desnutrición severa amenaza las vidas de 1,6 millones de niños. Es la peor crisis que se ha visto en la región desde 2012. Caritas teme que la situación se deteriorará aún más en los próximos meses, que serán críticos.
En la aldea Angoual Tank en Níger, Sakina Mato forma parte de un negocio de procesamiento de procesamiento de maní que utiliza herramientas suministradas por el proyecto PASAM-TAI de Catholic Relief Services y capacitación impartida en el mismo proyecto. El aceite del maní se vende en la comunidad y los beneficios se comparten entre los miembros. Foto por Michael Stulman/CRS
La emergencia más reciente ha sido provocada por la escasez de lluvia que ha resultado en escasez de agua, cosechas y forraje, así como en la pérdida de ganado. Los agricultores se han visto obligados a iniciar la transtermitancia estacional cuatro meses antes y recorriendo mayores distancias de lo normal. La seguridad alimentaria se ha deteriorado rápidamente en la región y el suministro de víveres para millones de personas se ha agotado. Muchos se están enfrentando a desafíos extremos como oportunidades limitadas de empleo, altos precios de los alimentos, desplazamiento y extremismo violento.
Las tasas de desnutrición aguda severa han aumentado en un 50 por ciento desde el año pasado en los seis países. Uno de cada seis niños menores de cinco años ahora necesita con urgencia tratamiento para salvar la vida a fin de poder sobrevivir. Las familias están reduciendo las comidas, sacando a los niños de las escuelas y privándose de servicios fundamentales de salud con tal de ahorrar dinero. Si no se aumenta la ayuda, muchas personas se verán en riesgo y se destruirán los medios de sustento de miles de familias, ya que se prevé el alarmante ciclo de adversidad en el Sahel empeorará.
Apremiante necesidad de asistencia alimentaria en Níger
Caritas Développement Niger (CADEV) dice que los violentos ataques de los militantes de Boko Haram han aumentado los desafíos, ya que decenas de miles de personas han sido forzadas a abandonar sus hogares en la región de Diffa, al sureste de Níger. Diffa es una de las regiones más pobres del mundo y las mujeres y los niños representan el 85 por ciento de los refugiados y desplazados.
Raymond Yoro, secretario general de CADEV, dice que la situación es terrible. «La situación humanitaria en Níger está empeorando a diario debido a la crisis en Diffa, Tillabery y Tahou», dice Yoro. «El número de personas necesitadas ha aumentado a 2,3 millones, un incremento de 400.000 en comparación con 2017».
Yoro dice que se estima que 1,4 millones de personas requerirán asistencia alimentaria en Níger en 2018. A CADEV le preocupan especialmente los más de 380.000 niños pequeños que sufren de desnutrición aguda severa y los otros 922.000 con desnutrición aguda moderada.
En Diffa, CADEV planifica reforzar la resiliencia de 1.500 hogares con transferencias en efectivo sin condiciones, dándoles a los niños desplazados acceso a centros recreativos y ayudando a 500 mujeres y 200 jóvenes con actividades generadoras de ingresos.
En la aldea Angoual Tanko en Níger, Hadjia Sahou Idi cuida ganado proporcionado por Catholic Relief Services. Foto por Michael Stulman/CRS
Emergencia alimentaria en Burkina Faso
En Burkina Faso, la situación también es crítica. Caritas dice que hay desnutrición aguda en seis provincias: Soum, Namentenga, Gnagna, Komandjoari, Boulkiemde y Kourweogo. Las familias están dependiendo de sus limitados ahorros para sobrevivir y se considera que más de 80.000 están en una fase de emergencia alimentaria.
Abbé Constantin Safanitié Sere, secretario general de Caritas Burkina Faso, dice que la situación es la peor que se ha visto en Burkina Faso desde la crisis humanitaria de 2012. El aumento en el precio de los cereales, el impacto el cambio climático y los ataques terroristas en varias regiones han aumentado los desafíos a que se enfrentan muchas personas que han sido desplazadas.
Caritas está comprometida a asistir a los más vulnerables con ayuda alimentaria y protección de los medios de sustento para ayudar a 2.000 hogares. «Si el proyecto no se financia en su totalidad, las consecuencias serían devastadoras para los hogares vulnerables que no pueden sobrevivir sin ayuda. En ese caso, habría que darles preferencia a los grupos más vulnerables; es decir, niños, mujeres embarazadas, madres lactantes y personas con discapacidades», dijo.
Medio millón de personas amenazadas por la hambruna
En Mauritania, las tasas de desnutrición aguda severa están en su nivel más alto desde 2018, con medio millón de personas amenazadas por la hambruna. Según un sondeo realizado en febrero, 147.507 personas podrían estar padeciendo de desnutrición aguda. Caritas Mauritania trabajara en Gorgol y Brakna suministrando víveres y asistencia agrícola para 23.300 personas.
«A pesar de la esperanza que trajeron unas cuantas lluvias aquí y allá, la situación humanitaria sigue siendo preocupante en áreas rurales», dice Caritas Mauritania. El acceso a alimentos adecuados y agua sigue siendo el principal problema y Caritas está trabajando para proteger los medios de sustento de la gente, al mismo tiempo que suministra alimentos y otra ayuda.
«Conforme el número de crisis aumenta en diferentes países, nuestra preocupación es que tendremos que empezar a ‘priorizar’ el sufrimiento debido a los escasos recursos financieros», dice Caritas Mauritania. «Eso sería dramático, porque significaría decidir a quién se le permitirá morir».
Caritas Mauritania está instando a las contrapartes a que den apoyo financiero para poder implementar su programa de emergencia y así apoyar a personas en sus localidades y evitar la migración a grandes centros urbanos.